La sorpresa como norma básica de aprendizaje


Los acontecimientos y la vorágine de vida en la que nos manifestamos, nos ha llevado a cuestionarnos nuestra actitud de sorpresa ante hechos, acciones o actitudes…pero ¿sorprendernos menos es bueno o malo? Yo diría que es malo.

La sorpresa forma parte de un proceso de excitación que obliga a cuestionar y despertar ciertos sentimientos personales. Vivimos en un mundo cada vez más soportado en el “pasotismo”, en la “indiferencia” o en el “individualismo”; sin embargo, si bien podemos caer en el pensamiento de que sólo importa el logro individual para el óptimo posicionamiento profesional, no debemos olvidar que a corto plazo, este hecho puede más o menos funcionar, pero por el contrario, aquello que no se materializa por desarrollos grupales no puede ser sostenible en el tiempo. La evolución humana ha sido clara en este hecho: El crecimiento del ser humano se desarrolla en base a experiencias colectivas y sociales (no individuales). Si bien un individuo puede ser elegido como representante o dominador, no lo es por sí solo, sino su función tiene sentido en el momento que es reconocido o (auto) impuesto sobre un colectivo.

La sociedad actual cada día nos ofrece nuevos símbolos e inputs, símbolos que son cada vez más difíciles de que superen nuestro umbral de sorpresa y realmente nos llamen la atención. Debemos estar atentos a cada acción, comportamiento y actitud que percibimos no sólo de nuestros semejantes (que suele ser más fácil) sino aquellas sorpresas que provienen de nosotros mismos. Cuántas veces nos hemos preguntado o cuestionado sobre una determinada acción mediante un “cómo pude ser capaz de hacer esto “ o “cómo no reaccioné como tenía que haberlo hecho”.

Os propongo que abramos los ojos, que seamos capaces de mirar a nuestros seres que nos rodean a la cara y que bajemos el umbral de nuestra sorpresa. De cada acción a nuestro alrededor podemos aprender y sobre todo, debemos orientarla a ser más felices con esta sorpresa. ¿Cuántas veces nos hemos dejado llevar por la monotonía? Fijaos en la imagen de sorpresa de los protagonistas de la foto que os he incluido en el post J

Leave a Reply