Archive for mayo 2011

NORMAL o NO, pero siempre las FORMAS

Como respuesta a un comentario de un lector al que agradezco su aportación, he decidido hacer esta nueva entrada.
Efectivamente adopto la frase: NO ES NORMAL. Cada vez que me levanto y analizo la planificación y actividades a lo largo del día me pregunto si ES NORMAL. Busco y reflexiono sobre si hay algo que pueda hacer diferente y sin embrago, adopto la costumbre y asumo con resignación lo que no es normal. Frente a esa normalidad puedo considerarla como tal o incluso catalogarla de manera completamente diferente. Prefiero quedarme con este último caso (ANORMAL) e intentar plantearme si eso es sostenible un día sí y otro también…pero todo sigue siendo NORMAL o al menos parecerlo.
Erradiquemos los principios vagos, la gestión orientada al inconformismo total y hagámonos felices a nosotros mismos. Una vez que nosotros estemos convencidos de por qué somos así y actuamos, seremos catalizadores de estados de ánimos hacia terceros. El sistema es difícil, el sistema es cerrado, pero es el sistema que tenemos el que debe guiarnos hacia el cambio.
Si bien puede considerarse la sentada de Sol en términos generales como de protesta fundada en contra de la gestión y representación de nuestros dirigentes, sigo sin entender la total laxitud y libertad en los mensajes que están en ella alocados. ES NORMAL? Yo creo que no. El oportunismo desvirtúa el propósito final. Vemos y podemos más o menos estar de acuerdo en determinadas cosas pero dejamos todo permisivo hacia los ojos de terceros. Perdonad pero NO ES NORMAL. Creo que ni el momento, ni las formas, ni la ejecución, ni la libertad de todo y las pocas obligaciones nos justifican a actuar así. La vida es difícil, la emancipación de la unidad familiar padres/hijos es muchas veces imposible, pero nadie nos limita la facilidad de la palabra y la libertad de ofender con expresiones de oposición. Esto no es NORMAL. El fin no justifica los medios y soy un férreo defensor de que las formas son casi más importantes que el contenido. Desgraciadamente esto es cada vez menos habitual y esto NO ES NORMAL.

¿Podemos cambiar el Sistema diciendo sólo que no estamos de acuerdo con él? Al menos se han dejado ver, pero necesitamos un método para que sea efectivo el cambio. Normalidad o no, es mejor la racionalidad de nuestros actos. No todo vale.


¿En qué consiste la Realidad?

Estamos pasando por un momento complicado y difícil. Hemos visto cómo una gran mayoría ha castigado el hacer, presupuesto saber hacer y buen hacer, de unos dirigentes nacionales y un determinado partido político y ahora qué hacemos? Son pocas las veces en las que un Gobierno ha sido castigado de esta manera en unas elecciones democráticas, los feudos más tradicionales han decidido dejar de serlos…

Con total independencia a la ideología o color político creo que es necesario reflexionar: Qué hubiera pasado si en una de nuestras empresas, los resultados de los directivos y ejecutivos de la misma sean similares a los votos conseguidos por el partido de turno que gobierne? La respuesta creo que es obvia; sin embargo, el poder nos cautiva, nos hace ser más fuertes en los momentos de debilidad y nos hace autoprotegernos. Creo que no es éticamente correcto ni lícito permanecer y agachar la cabeza cual avestruz temeroso. Por encima de todo están las personas y el honor de aquellos que vivimos en la sociedad que intentamos hacer cada día mejor.. Cuando se pierde la confianza de quien te la ha otorgado, debes intentar recuperarla pero ojo, esta recuperación debe forjarse fuera de la situación que has originado. Autoanalízate en soledad, reflexiona y asume la derrota. Escóndete y hazte tú mismo fuerte antes de ganar nuevamente la confianza de terceros. Esto no es un juego, no es la satisfacción del deseo de autoprotección. Seamos dignos y seamos ejemplares. Las cosas no se resuelven con un Congreso o unas primarias. Esto va más allá. Estamos hablando de valores, de dignidad, de responsabilidad (y no sólo política) de cualquier tipo, de poder salir a la calle y sentir la satisfacción de que has sido y eres útil, de reconocer que has hecho todo aquello que ha sido posible.

Este post no va de izquierdas ni derechas, ni de rojos o azules,…este post va orientado hacia la meditación por un bien común y a la forma en que uno debe recompensar los méritos de otro. Seamos justos y recompensemos por los méritos directos y no por la incapacidad de la alternativa. La libertad es la gracia del proceso, pero una libertad no racional es la más mísera represión.

Movimiento 15M: y ahora qué?

Efectivamente estamos ante una Spanish Revolution.
El asentamiento de la Puerta del Sol de Madrid, seguido en tantas ciudades de nuestra geografía, nos ha hecho ser reflexivos a la hora de poder manifestar nuestro más sincero sentimiento de rebelión; sin embargo, creo que estamos ante un movimiento muy particular.
Sí bien podemos entender lo que hay detrás de este movimiento, lo que me sorprende y cada día que pasa aún más, es cómo se es capaz de defender unas ideas con una reivindicación que considero, no tiene demasiado foco. Contra qué se está en desacuerdo? Si bien podría ser en contra del gobierno, sus políticas y gestión, por qué no nos manifestamos ante esas instituciones que mejor lo representan? Es lo mismo una manifestación o asentamiento en la puerta del Sol o es más eficaz realizarla justo enfrente de la residencia del Presidente del Gobierno o incluso, en las puertas de nuestros más altos estamentos de los poderes legislativo y judicial (Cortes, Senado, Tribunal Supremo, Tribunal Constitucional). La situación de las cajas españolas también es objeto de las propuestas del movimiento…la verdad, sigo sin entenderlo…
Podemos estar más o menos de acuerdo en lo que se pide, pero es necesario plantearse y redefinir el modo en que estas reivindicaciones deben articularse. (http://democraciarealya.es/?page_id=234). Veo palabras y frases vagas, generalistas que no por ello vacías de sentido, pero veo sobretodo un "estoy descontento con todo" pero no sé cómo hacer para cambiarlo.
No bastan las concentraciones multitudinarias de estar en contra de grandes injusticias formales, sino debamos ejercer un movimiento de protesta perfectamente consolidado y fundado. Hagámoslo de la manera más democrática que podamos y busquemos un objetivo y un medio para luchar más allá de una sentada en las principales ciudades. ¿Somos capaces de construir un mundo mejor con este tipo de manifestaciones? Lamentablemente no veo en los ojos de las personas que se manifiestan ese deseo, fervoroso deseo, de trabajar y trabajar incansablemente para relanzar a este país de la situación en la que nos encontramos. Yo no estoy de acuerdo en el modelo político actual, pero lo que tengo claro es que mis ganas, mi deseo de comerme el Mundo, es suficientemente más intenso a aquel que veo a través de la frialdad de un determinado televisor.
Es indiscutible el toque español al movimiento: lo hemos montado de una manera rápida, medio improvisada, en un momento que no entiendo por qué, pero que ha llegado a ser aglutinador. Pero… y ahora qué? ¿Qué va a pasar a partir de estos momentos? ¿Podemos consolidar el movimiento en un partido político o en una acción con unas propuestas de peso y argumentadas? ¿Quiénes realmente están detrás de él? ¿Hay KnowHow y suficiente preparación como para hacernos creer en ellas?
A mí me preocupa pensar que los que ahí están, defendiendo unos ideales importantes, no sean capaces de articularlos y llevarlos a la práctica.
Seamos inteligentes y formémonos en conocimientos, actitudes y valores que nos permitan construir un futuro mejor para nuestros hijos. Pensemos en necesidades, pensemos en trabajo y al final, pensemos en democracia. Sólo así haremos una vida más justa.

El autoconocimiento como primer paso de progreso personal y profesional

Hoy estamos inmersos en un proceso de definición y análisis de la situación social, económica y política. Crisis, corrupción, burbuja inmobiliaria, insatisfacción social., indefinición de instituciones públicas..., son fenómenos cada vez más comunes en nuestra Sociedad.

El ser humano tiende de manera innata, a desarrollar el olfato social mediante la observación y reflexión hacia nuestro entorno externo más cercano y hacia nuestros semejantes pero, ¿hemos podido ser capaces de adentrarnos en una reflexión interna?. ¿Somos y dedicamos los suficientes esfuerzos a autoconocernos? Si no nos conocemos, no podemos autocomplacernos. Es la norma básica que alimenta el sentimiento sexual más básico, pasando por cualquier matiz placentero de nuestras más internas sensaciones. Sólo se es capaz de saber qué no nos gusta o conocer aquello que no nos atrae cuando la experiencia vivida nos lo ratifica. El discurso de Steve Jobs en la Universidad de Stanford ratifica este hecho: sólo somos capaces de entender el pasado. No somos capaces de definir ni conocer el futuro y a lo más que podemos llegar en un futuro, es a entender el pasado: “la conexión de puntos”. De lo único que no tenemos certeza clara es de nuestro futuro y por tanto, nos debemos conformar con vivir el presente a partir de la experiencia y vivencia del pasado. Necesitamos descifrar los impulsos que el pasado nos ha dado para conocernos mejor y poder desarrollar aquellas competencias y conocimientos que mejor nos satisfagan nuestro presente, y si es así, nuestro futuro.

El post de hoy trata de hacer una autorreflexión de en qué somos buenos y cómo nos sentimos más felices. Buscamos preferencias porque nos producen satisfacción. Alineamos nuestro ego interno con nuestra satisfacción y sólo a partir de allí, podremos observar el Mundo de otra manera: entorno exterior y semejantes, se enmarcan en un escenario diferente.

Hagámonos felices a nosotros mismos y una vez conseguido esto, podremos hacer felices a quienes nos rodean y por ende, buscar un mundo más justo para todos. La única herramienta que podemos utilizar es aquella que está más al alcance de nuestra mano y es por ello, que resulta la más difícil: tiempo y ganas de observarnos.

¿Cómo nos vemos nosotros mismos? ¿Somos capaces de entendernos? ¿Qué herramientas podemos utilizar para ello?

La Estrategia: definición y perfil del estratega

Hoy es un post importante. Hoy nos toca hablar de la estrategia

Cada día y en cada momento, nos convertimos en responsables de nuestras propias acciones; sin embargo, estas acciones ¿obedecen a algún principio premeditado o forman parte de un cúmulo de despropósitos, automatismos, espontaneidad y/o reflejos de nuestra conducta? Ahora es cuando hablamos y tiene sentido introducir el término de estrategia.

Estrategia es un programa coordinado y planificado de acciones que se llevan a cabo para lograr un determinado fin. Por tanto, es necesario clarificar los conceptos que subyacen de esta definición:


1) No es algo aislado, sino que forma parte de una maquinaria perfectamente engranada. La estrategia aplica sí y solo sí , si es capaz de aglutinar más de una acción. Por tanto, estamos haciendo énfasis en la coordinación y planificación de acciones. Una estrategia sin un hilo conductor es una estrategia autocomplaciente que no va más allá de erigir a quien la procesa en meros recursos ejecutores. La planificación de las acciones que aglutinan la estrategia está perfectamente temporizada, con un calendario de actuación bien definido y perfectamente entendible.

2) Las acciones de la estrategia están allí para responder a la causalidad básica de que sean ejecutadas. El propósito de una estrategia en sí misma es el propósito de hacerla seguir, bien por autoconvencimiento (ideal), bien por imposición o una mezcla de ambas.

3) Toda estrategia debe llevar a un fin, meta o misión. Si no existe ese fin, no está claro o no se asume, la estrategia no existe y por tanto, realizaremos acciones consecutivamente con un final totalmente incierto.

4)La estrategia se desarrolla entre miembros de un colectivo. No hay estrategias unipersonales. Si bien, una determinada estrategia puede ser unitaria (llevada a cabo por una única persona), esa estrategia tiene sentido en el momento en que se desarrolla en un colectivo. Nunca en una estrategia el hacedor de la misma, el observador externo, el colaborador y el destinatario son la misma persona.

5) La estrategia se crea, se genera y se busca. Nunca una estrategia se desarrolla de una manera espontánea. Todo aquello que nos lleva a la espontaneidad, forma parte de la práctica, de la operación, del día a día . No debemos confundir supervivencia, operación, táctica o gestión diaria con un proceso de estrategia.

Ahora hablamos del perfil de estratega. El estratega se hace pero también se nace. Las competencias y habilidades de un estratega se deben fomentar y desarrollar pero los principios básicos de todo proceso estratégico, deben ser puestos en práctica por alguien con principios innatos. No podemos ir contra natura y los mejores resultados se consiguen por aquellos que son capaces de experimentar con su preferencia natural. Como diría algún entendido en materia, el desarrollo del hemisferio y frontal derecho.

¿Habéis podido corroborar cómo y por quién es ejecutada la estrategia en vuestras empresas? ¿ Hay facilidad de confusión de lo que entendemos y cómo se aplica la Estrategia? ¿Sois mejores estrategas o tácticos?

Discurso de Obama 2 de Mayo 2011: "...the worst images are those that were unseen to the world"

 Aquí dejo un mensaje de reflexión. Obedece al discurso de Obama el pasado 2 de Mayo ante la noticia de la muerte de Usama Bin Laden. Me quedo con el párrafo siguiente que transcribo directamente en inglés:

"And yet we know that the worst images are those that were unseen to the world. The empty seat at the dinner table. Children who were forced to grow up without their mother or their father. Parents who would never know the feeling of their child’s embrace. Nearly 3,000 citizens taken from us, leaving a gaping hole in our hearts."

Cuántas veces no somos capaces de medir las consecuencias de nuestros actos pero, podríamos  actuar de otra manera si medimos el impacto de nuestras  decisiones en las personas ?


El discurso completo de Barack Obamay la muerte de Bin Laden
2 de Mayo de 2011


"Buenas noches. Esta noche puedo anunciar al pueblo estadounidense y al mundo que Estados Unidos ha dirigido una operación que ha causado la muerte de Osama bin Laden, el líder de Al Qaeda, y el terrorista responsable del asesinato de miles de hombres inocentes, mujeres y niños.
Hace casi 10 años que un luminoso día de septiembre se vio ensombrecido por el peor atentado contra el pueblo estadounidense de nuestra Historia. Las imágenes del 11-S son parte de nuestra memoria nacional: aviones secuestrados cortando un cielo sin nubes de septiembre, las Torres Gemelas desplomándose, humo negro en el Pentágono, los restos del vuelo 93 en Shanksville, Pensilvania, donde la actuación de heroicos ciudadanos evitó más dolor y destrucción.
Y sin embargo, sabemos que las peores imágenes son aquéllas que el mundo no vio. La silla vacía en la mesa a la hora del almuerzo. Niños que se vieron obligados a crecer sin su padre o su madre. Padres que nunca disfrutarán el abrazo de sus hijos. Cerca de 3.000 ciudadanos nos fueron arrebatados, dejando un vacío en nuestros corazones.
El 11 de septiembre de 2001, en nuestro tiempo de dolor, el pueblo estadounidense se unió. Ofrecimos una mano a nuestros vecinos, y a los heridos, nuestra sangre. Reafirmamos nuestros lazos en común, y nuestro amor por la comunidad y el país. Ese día, sin importar de dónde veníamos, a qué dios orábamos, o de qué raza o grupo étnico éramos, nos unimos como una familia americana.
Estábamos juntos también en nuestra determinación de proteger a nuestra nación y de llevar ante la justicia a los que cometieron este brutal ataque. Pronto supimos que los ataques del 11-S fueron perpetrados por Al Qaeda -una organización encabezada por Osama bin Laden, quien había declarado abiertamente la guerra a Estados Unidos y se había comprometido a matar inocentes en nuestro país y en todo el mundo. Y así fuimos a la guerra contra Al Qaeda, para proteger a nuestros ciudadanos, nuestros amigos y nuestros aliados.
En los últimos 10 años, gracias al incansable y heroico trabajo de nuestro ejército y nuestros expertos en contraterrorismo, logramos grandes avances. Desbaratamos atentados terroristas y fortalecimos nuestra defensa. En Afganistán, derrocamos al Gobierno talibán, que dio apoyo y un refugio seguro a Bin Laden. Y en todo el mundo, trabajamos con nuestros amigos y aliados para capturar o matar a decenas de terroristas de Al Qaeda, entre ellos varios de los que tomaron parte en el complot del 11-S.
Sin embargo, Osama Bin Laden evitó su captura y huyó por la frontera afgana a Pakistán. Y Al Qaeda, mientras tanto, continuó operando a lo largo de esa frontera y a través de sus filiales en todo el mundo.
Poco después de asumir el cargo, ordené a Leon Panetta, director de la CIA, hacer de la ejecución o la captura de Bin Laden la prioridad máxima de nuestra guerra contra Al Qaeda, al tiempo que continuaban nuestros esfuerzos por desbaratar, desmantelar y derrotar a su organización.
Entonces, el pasado agosto, tras años de duro trabajo de nuestros servicios de inteligencia, fui informado de una posible pista de Bin Laden. No era ni remotamente una certeza, y nos llevó meses seguir esa pista sobre el terreno. Me reuní repetidamente con mi equipo de seguridad nacional mientras acumulábamos información sobre la posibilidad de haber ubicado a Bin Laden en un complejo remoto en Pakistán. Y finalmente, la semana pasada, decidí que teníamos suficiente información para pasar a la acción y autoricé una operación para capturar a Osama bin Laden y llevarlo ante la justicia.
Hoy, bajo mi dirección, Estados Unidos ha lanzado una operación contra el complejo en Abbottabad, Pakistán. Un pequeño grupo de estadounidenses llevó a cabo la operación con extraordinaria valentía y capacidad. Ningún estadounidense resultó herido. Procuraron evitar víctimas civiles. Tras un tiroteo, mataron a Osama bin Laden y se hicieron cargo de su cadáver.
Durante más de dos décadas, Bin Laden ha sido el líder de Al Qaeda y su símbolo, y ha seguido planeando ataques contra nuestro país y nuestros amigos y aliados. La muerte de Bin Laden marca el logro más significativo hasta la fecha en el esfuerzo de nuestra nación para derrotar a Al Qaeda.
Sin embargo, su muerte no significa el fin de nuestro esfuerzo. No hay duda de que Al Qaeda continuará con los ataques contra nosotros. Por lo que debemos –y lo haremos- mantener la alerta en el país y el extranjero.
Al hacerlo, también debemos reafirmar que los Estados Unidos no están -ni nunca estarán- en guerra con el Islam. He dejado claro, al igual que el presidente Bush lo hizo poco después del 11-S, que nuestra guerra no es contra el Islam. Bin Laden no era un líder musulmán, era un asesino en masa de los musulmanes. De hecho, Al Qaeda ha matado a decenas de musulmanes en muchos países, incluyendo el nuestro. Así que su desaparición debe ser bienvenida por todos los que creen en la paz y la dignidad humana.
Con los años, he manifestado en repetidas ocasiones que tomaríamos medidas en Pakistán si tuviéramos la certeza de que Bin Laden se encontraba allí. Eso es lo que hemos hecho. Pero es importante señalar que nuestra cooperación antiterrorista con Pakistán nos ayudó a llegar hasta Bin Laden y el recinto donde se escondía. De hecho, Bin Laden declaró la guerra a Pakistán, y ordenó los ataques contra el pueblo paquistaní.
Esta noche he llamado al presidente Zardari, y mi equipo también ha hablado con sus homólogos paquistaníes. Están de acuerdo en que éste es un buen e histórico día para nuestras naciones. Y en el futuro, es esencial que Pakistán continúe unido a nosotros en la lucha contra Al Qaeda y sus afiliados.
El pueblo estadounidense no eligió esta lucha. Llegó a nuestras costas, y comenzó con la masacre sin sentido de nuestros ciudadanos. Después de casi 10 años de servicios, lucha y sacrificio, conocemos bien los costos de la guerra. Estos esfuerzos pesan sobre mí cada vez que, como Comandante en Jefe, tengo que firmar una carta para una familia que ha perdido a un ser querido, o mirar a los ojos de un miembro del servicio que ha sido gravemente herido.
Los estadounidenses entienden los costos de la guerra, aunque como país nunca toleraremos que nuestra seguridad se vea amenazada ni nos quedaremos de brazos cruzados cuando se mate a nuestra gente. Seremos implacables en la defensa de nuestros ciudadanos y de nuestros amigos y aliados. Seremos fieles a los valores que nos hacen quienes somos. Y en noches como ésta, podemos decirles a aquéllos que han perdido a seres queridos por el terrorismo de Al Qaeda: se ha hecho justicia.
Esta noche, damos gracias a la inteligencia y a un sinnúmero de profesionales de la lucha contra el terrorismo que han trabajado incansablemente para lograr este resultado. El pueblo estadounidense no ve su trabajo, ni sabe sus nombres. Pero esta noche, sienten la satisfacción de su labor y el resultado de su búsqueda de la justicia.
Damos gracias por los hombres que llevaron a cabo esta operación, ya que ejemplifican el profesionalismo, el patriotismo y la valentía sin igual de los que sirven a nuestro país. Y son parte de una generación que ha llevado la mayor parte de la carga desde ese día de septiembre.
Por último, permítanme decirle a las familias que perdieron seres queridos en el 11-S que nunca hemos olvidado su pérdida, ni hemos dudado de nuestro compromiso en hacer todo lo posible para prevenir otro ataque a nuestro territorio.
Y esta noche, vamos a rememorar la sensación de unidad que prevaleció ese 11-S. Sé que a veces se ha visto debilitada. Sin embargo, el logro de hoy es testimonio de la grandeza de nuestro país y la determinación del pueblo estadounidense.
La causa para asegurar a nuestro país no se ha completado. Pero esta noche, volvemos a recordar que Estados Unidos puede hacer lo que se proponga. Esa es la historia de nuestra historia, ya sea la búsqueda de la prosperidad de nuestro pueblo, o la lucha por la igualdad para todos nuestros ciudadanos; nuestro compromiso de defender nuestros valores en el extranjero, y nuestros sacrificios para hacer del mundo un lugar más seguro.
Recordemos que podemos hacer estas cosas no sólo por la riqueza o el poder, sino por lo que somos: una nación, bajo Dios, indivisible, con libertad y justicia para todos.
Gracias. Que Dios os bendiga. Y que Dios bendiga a los Estados Unidos de América."